Regreso

Estoy de vuelta en mi ciudad natal

cuando leo la noticia de que una chica trans de 16 años se ha suicidado en medio de un centro comercial.

El artículo se refiere a ella por su nombre de nacimiento y género

y recuerdo que “descansa en paz”,

es un lujo que solo se concede a esos cuerpos

cuya violencia acaba con la muerte.

Estoy sentade afuera del consultorio de un ortopeda,

esperando que esta vez se pueda diagnosticar el dolor de espalda crónico que he desarrollado este último año,

junto a mi hay una mujer de mediana edad,

y es allí cuando pienso que este también es un lugar para experimentar la intimidad del toque de un hombre como si a él realmente le importara

Es cuándo lo entiendo,

en esta ciudad ciertos actos de transgresión son permitidos

mientras estén cubiertos por dinero o alguna cita bíblica para justificarlos,

lo que en términos prácticos no guardan diferencia alguna

El año pasado comencé a identificarme públicamente como no binarie,

y recientemente como trans

el doctor no lo sabe, pero mi madre si,

sin embargo, si ella pudiera usar alguna negación como pronombre para mí, lo haría.

Hoy más temprano mi padre me dice que les jóvenes, como yo,

no deberíamos tener tanto dolor en nuestros cuerpos,

o en otras palabras, se supone que no deberíamos estar herides

Aparentemente solo solemos hacer daño.

Vivimos en una ciudad caribeña y colonial,

lo que significa que hay cruces colgando en cada pared del consultorio médico,

y citas bíblicas en letras como Comics Sans o Impact

utilizadas aparentemente sin ninguna ironía

Entonces pienso, que increíble que un símbolo y una tipografía puedan significar cosas tan diferentes para dos personas

su adorno, mi cliché

su partida de nacimiento, nuestra orden de registro.

nuestra feminidad, su burla

su cruz, mi compañera de clases Alba,

quien en mi primer año de universidad me dijo que me pudriría en un pozo de azufre ardiente si no abrazaba a Jesucristo

El doctor toca los músculos en mi espalda

y me pregunta si tuve un accidente,

necesita una explicación de cómo es posible que algo se sienta tan irrevocablemente roto y aún así siga funcionando

Parece que mi doctor considera el dolor como una excepción

¡Qué privilegio es navegar el mundo de esa manera!

Como si el dolor es algo que puedes identificar y eliminar,

Como si no fuera lo único que te recuerda que tienes y eres un cuerpo.

...

Está es la ciudad en la que intenté suicidarme a mis 14 años,

no tenía las palabras para eso en ese momento,

solo una opresión en mi pecho,

un eco en mi voz,

y una ingesta numerosa de tranquilizantes

No había palabras para el por qué,

solo había este cuerpo

y su religión

y una cita bíblica contenida en mí

No sabía lo que estaba haciendo

pero sabía por qué lo estaba haciendo

y eso

se sintió

como suficiente.

A veces extraño esa sensación de convicción pura

Hoy tengo todas estas teorías para explicar,

cómo este doctor y su dios y esta ciudad,

hicieron que este cuerpo encontrara disforia.

que la disforia encontrara mi mano,

que la mano encontrará unas pastillas

y las pastillas me encontraran a mi...

pero no tengo más esa convicción que viene

por someterte a tu cuerpo,

escucharlo de esa manera

dejarlo en silencio

y mantener las pastillas en el estómago

Estos días tengo toda la teoría

para saber por qué lo habrían llamado un "suicidio" y no un "homicidio",

es para limpiar de sus propias manos y cruces todo la sangre,

como si nos odiáramos a nosotres mismes porque elegimos y no porque nos dijeron,

como si nos matáramos porque queríamos y no porque repetíamos sus instrucciones

como si no estuviéramos siguiendo una profecía en su nombre,

el de ÉL,

su Dios

...

Doctor él único accidente en mi vida

fue ese en el que me proclamaron “varón” y negro” al nacer

y desde ese momento he tratado de recuperarme

La cuestión con este cuerpo es que usarán palabras como

"ansiedad" y "estrés" para diagnosticar el dolor

en lugar de "raza" y "género"

y todas las demás palabras que nunca llegaron a sus biblias o textos médicos

Estos diagnósticos los llevo como mandamientos sobre mi espalda,

desde que un hombre que se parecía a usted doctor,

le dijo a mi madre que nací y

olvidó mencionar que también proclamó mi muerte.

Cuántas veces la vida no es acerca del accidente, el insulto, el golpe, el suicidio

como si, de la violencia, el trauma, un género,

como si fuera un episodio que empieza y se detiene.

No, no funciona de esa manera,

nunca se detiene.

La mayoría de las veces es aburrida, silenciosa,..., normal

se hunde tan profundo en nosotres que a veces no diferenciamos

entre nuestra depresión y opresión,

violencia y nuestro género

pecado y nuestra piel

Tenemos dolor no por un accidente,

es por la norma

No estamos rotes,

funcionamos de la manera en la que nos dijeron debe ser

...

Le digo al doctor que me resbalé y me caí

Por la misma razón que dejo que mi madre use los pronombres equivocados,

de la misma manera que le digo a la gente que estoy más feliz ahora

porque me mudé lejos de esa pequeña, caribe y colonial ciudad

de la misma manera en la que muches de nosotres aprendimos a pretender cuando éramos niñes y nunca dejamos de hacerlo,

porque así duele menos

y a veces

eso es suficiente